El
buitre Negro o zopilote y su función en la naturaleza
Por: Gicela Moreno H.
Generalidades del
zopilote
El zopilote es un ave carroñera, su nombre viene del Náhuatl
(Tzotl) que quiere decir “inmundancia”(sic) y “pilotl” que quiere decir
“colgar” (wikifaunia.com, 2013). Esto es que hace referencia a que mientras
consume la carroña ésta cuelga por su pico. Mide aproximadamente de 65 a 70 cm.
de longitud y 1.5 metros de un ala a otra, tiene su plumaje negro, la cabeza
carece de plumas, es rugosa y de color
gris, su pico es fuerte y ligeramente curvo para permitirle perforar los tejidos, su desplazamiento en el suelo es
torpe pero son muy hábiles en el planeo para detectar los cadáveres y despojos,
los cuales consume con avidez, se asocian en grupos jamás andan solos, anidan
entre las rocas o en las copas de los árboles, ponen dos huevos en cada
anidación.
Cómo detecta a sus “presas”
El buitre negro, es capaz de detectar los despojos debido a
su gran capacidad de captar los olores fétidos aún a mucha distancia, sea que
éstos se encuentren bajo dosel de árboles o encerrados; su estrategia consiste
en volar en círculos contra el viento para poder detectar algún aroma que les
indique de algún sitio en donde se halle carroña, si esta detección leve
sucede, entonces el grupo, planeando en conjunto, se acerca al sitio de donde
brota el aroma, cerrando el círculo de planeo y sobrevolando el sitio en donde
se ubica la carroña, una vez que se posicionan sobre el lugar, continúan
volando en círculos para verificar y posteriormente un miembro de la parvada
(probablemente el líder) se separa del grupo y baja hacia la carroña, cuando la
empieza a romper para consumirla, los demás miembros van bajando en efecto
cascada hasta que toda la parvada se apresta a consumir los despojos.
Cuál es su
importancia y función en la naturaleza
Su función en la naturaleza es la de ser limpiadores, ya que
al consumir la carroña y despojos de animales muertos, evitan la emisión de
olores fétidos, la proliferación de enfermedades que podrían hacerse epidémicas
por la cantidad de gérmenes patógenos que se desarrollarían en dichos
cadáveres, al mismo tiempo aceleran el proceso de desintegración de estos
cadáveres, que posteriormente se integran como abono a la naturaleza, lo que da
una muestra de la vital importancia de estas aves y de lo necesario que es
cuidarlas.
Fuentes consultadas
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